No me atrevo a vaticinar que pasará con Lito y Marchesini pues The Strongest navega a la deriva, sin rumbo, sin brújula, desde una presidencia autista dedicada a sus negocios hasta una dirigencia caótica llegando un plantel desmotivado, sin garra, desconcertado, desunido… El resultado: hay jugadores que ni siquiera desean saltar a la cancha. O el presidente Kurt pone mano dura o el Tigre se precipita hacia el abismo, dando vueltas y vueltas sobre los círculos de Dante.

The Strongest se encontró con un gol tempranero de Chumacero y luego más nada. El conformismo y la apatía de los aurinegros posibilitó la crecida de los “santos” que se pusieron por delante sin hacer gran cosa. Los dos arqueros –Vaca y Lampe- tuvieron una sensacional tarde de atajadas, quizás lo mejor de un partido extraño, tan raro como el final del mismo con un penal no cobrado a favor de San José y un árbitro –otra vez pésimo- acabando el partido cuando Micky Loayza se disponía a patear contra el arco stronguista. Surrealista, simplemente patético, dantesco, como el panorama de The Strongest. Y para redondear todo, llega Villegas, el mismo técnico que dijo hace también tres meses que el Tigre había comprado el campeonato. Una pesadilla.

Que alguien me despierte, por favor.

Mil gracias por tu participación...!

Recuerdo el remate de Cristaldo, luego de un centro de Parada. El saque de esquina de Escobar para el cabezazo de Ramallo y la eterna derrota del Subcampeón del Mundo. El “Dale Campeón, Dale Campeón” que grité me seca todavía la garganta. Habíamos ganado a lo Tigre, perenne fórmula de inagotable eficacia traspolada al ámbito internacional, ante un rival de elite mundial. Neymar, tremendo futbolista codiciado por los clubes más poderosos del orbe, perdió acá, frente a nosotros.

Recuerdo el pase en profundidad de Soliz, para que Gonzales la domine al mismo tiempo que se da la vuelta para pegarle al arco de frente, mientras el arquero del Juan Aurich peruano y de la selección de su país quedaba desubicado ante el movimiento del chileno. Recuerdo la corrida de Escobar, dominando la pelota con la zurda pero enganchando hacia adentro con la diestra, para pegarle con esta última desde fuerza del área. Un sablazo al ras del piso que nos daba nuevamente la victoria. Otra vez a lo Tigre.

También recuerdo que ni bien empezó el segundo tiempo, el Inter de Porto Alegre sufrió por la aguerrida arremetida de Ramallo, que en complicidad con uno de sus defensores anotaba el uno a cero. Apreté el reloj para que avance más rápidamente, y como todos, hubiera querido que ganemos. Lamentablemente, las decisiones técnicas que se tomaron en ese partido desnudan las grandes diferencias insuperables en el corto plazo entre la preparación profesional de los trabajadores en nuestro futbol y aquellos de países con mayor tradición. De todas formas, en un pluriestado con justicia cocacontrolada, que se enfrentó al imperio romano seguramente arrojándoles papalisas a los gladiadores invasores, no podemos exigir demasiado.

El psicoanálisis freudiano afirma que la verdad está en el pasado. No podemos olvidarnos de cómo llegamos acá y en qué condiciones. Contrariamente a opiniones frívolas, creo que hemos ganado el privilegio de representar a nuestro país en condición de campeón. Parémonos y saludemos al Campeón.

Dios quiera que la segunda fase de la Libertadores nos esté esperando. Villegas nos dirigirá por tercera vez, al mando de una dirigencia tremendamente seria en el manejo económico, pero debilitada por el comportamiento de jugador amateur de juego de video del comité de futbol, nulificado por el precario rendimiento de casi todos los extranjeros contratados, a excepción a mi parecer de Chamagol, que si bien se le pueden contar algunos fallos importantes, es el único que entiende lo que Escobar quiere hacer, siguiendo la línea de comparación con los otros refuerzos foráneos.

Villegas tendrá que hacer que el Tigre siga marchando siempre adelante, siempre arrogante; un luchador sin par.

En una de las maratónicas reuniones, el Presidente de esa entonces nos informa que se necesitaban algo así como $us.- 70.000 para cumplir con estas obligaciones, y solicitó a los Directores si podían colaborar prestando dinero y que el mismo se les devolvería con la venta de los abonos que se estaban emitiendo para toda la primera fase de la Copa.

Ya feliz y tranquilo por haber cumplido con ellas, recibo los tickets e invito a otros cuatro miembros del Directorio que estaban ayudando esa tarde-noche (de los cuales no doy sus nombres por motivos de seguridad y protección) para ir a ver el espectáculo…, el que al final fue una inolvidable noche donde las preciosas niñas aparte de enviarnos especiales saludos desde el palco escénico donde actuaron, demostraron ser unas verdaderas y magníficas “tigresas”….