El partido se jugó ante escasa cantidad de público que disfrutó en el primer tiempo del juego de la visita, que llegó a curar heridas y una segunda etapa en el que el local dio una muestras de buen rendimiento, aunque sus argumentos no les alcanzaron para desigualar el marcador y dejar establecido que los puntos se quedaban en casa.

Los atigrados mientras transcurrían los minutos de los primeros 45 de juego hicieron gala de mejores acciones en el campo, llegaron con mayor precisión pero no supieron aprovechar las oportunidades que se les presentaron, y el palo del arco rval les jugó una mala pasada.

Aunque no fue un partido brillante, el Equipo del Pueblo quiso mostrar sus mejores acciones, pero chocó con un elenco decidido a marcar la diferencia y que apeló a jugadas individuales que al final no salieron como esperaban.

Los dueños de casa una vez más contaron con Vladimir Castellón quien poco a poco se constituyó en uno de sus jugadores más desequilibrantes. Ya en la segunda etapa el celeste cochabambino ingresó con otra mentalidad que posibilitó los dos goles y al final sirvió de mucho para rescatar por lo menos un punto de los tres que perdían en casa.

Los goles para ambos equipos comenzaron a llegar desde el minuto 38, cuando Marco Barrera, de The Strongest aprovechó un centro preciso para mandar la pelota al fondo del arco, en una confusa jugada en el que la defensa local reclamaba posición adelantada.

Ya en el segundo tiempo, Harold Reina en el minuto 64 tras muchos rebotes en el área del gol convierte el segundo para la visita, el remate al sector derecho era inatajable. El gol llegó cuando mejor jugaba el equipo cochabambino.

Cuando se jugaba el minuto 75 Vladimir Castellón aprovecha un mal despeje de la defensa atigrada y sin dudar envía el balón dentro el arco, el gol permitió a los dueños de casa a recargar fuerzas y buscar el empate.

Ya en el epílogo del compromiso (91‘) Nicoll Taboada aprovecha un rebote cerca del arco y convierte de cabeza el tanto del empate. Antes el remate fue de Castellón pero la pelota rebotó en el palo y el jugador de Aurora no desaprovechó la oportunidad.

¿No es paradójico y significativo que la gran mayoría de los equipos en Bolivia juegan mejor fuera que en casa? ¿No es triste comprobar que los estadios de titularidad pública –poquísimos equipos tienen una cancha propia- están hechos pelota porque se usan más para conciertos y actos religiosos que para jugar al fútbol? En esas cosas estaba pensando mientras veía un partido anodino que se encendió al final entre un motivado Aurora y un The Strongest sin “punch” arriba. El Tigre perdonó por su falta de puntería, especialmente del colombiano Reina y permitió una crecida de Aurora en los últimos eléctricos quince minutos.

Villegas mantuvo la misma defensa (Jair, Barrera-Méndez, Bejarano) e hizo cambios obligados en la mitad de cancha y en la pareja ofensiva. Marcos Paz hizo dupla de contención con un Chumacero que vio crecer su desempeño futbolístico. Como volantes mixtos aparecieron Dani Chávez y por derecha el costarricense Kenny Cunningham que tuvo el mejor partido desde que llegó a filas stronguistas. Para sustituir a Escobar que se quedó en La Paz por el nacimiento de su cuarto hijo, entró Melgar para acompañar a Reina que tuvo otra tarde errática y van…).

The Strongest tuvo más la pelota en la primera parte, combinando por las bandas para crear media docena de ocasiones claras. Con el 0-2 se metió atrás, se cansó y permitió la reacción de los ilusionados chicos de “Tucho” Antelo. La necesidad para contar con un nueve goleador en el Tigre es imperiosa.

En filas celestes, sólo Charles da Silva estuvo a un nivel óptimo (dos tiros al palo). El “equipo del pueblo” exageró en los ataques por el centro de la zaga stronguista pero tuvo el corazón suficiente para lograr la igualada. El Tigre mantiene su manera de jugar fuera de casa, su juego atrevido fuera de casa y tan sólo necesita un par de refuerzos y recuperarse plenamente del desgaste de la Copa Libertadores de América para cerrar los partidos con más serenidad y aplomo.

Cerca a 4.000 espectadores en el ‘Sudamericano’ Félix Capriles; en una tarde de feriado, muy asoleada, y en la que los muchachos de la UltraSur – Cochabamba, sí que se hicieron sentir, tanto que daba la impresión de que estábamos jugando de locales…

Minutos antes de observar (por la TV) el compromiso nuestro, veíamos el partido entre el Barcelona y el Bayern en la semifinal de la Champions; y nos dimos cuenta que el fútbol que se practica en “las Europas” (como dicen los del frente); se parece muuucho al balompié boliviano…; y me refiero al hecho que allá también juegan 11 contra 11, juegan con un balón, y utilizan árbitros y jueces de línea…, en fin., existe mucha similitud…, pero en el resto, son ooootra cosa.
;)

Qué desastroso el campo de juego de este estadio departamental de la Llajta, parece más un potrero que un campo deportivo donde se practica fútbol…., lamentable realmente…

Referente al partido mismo…, nuevamente se nos esfuman puntos en los últimos instantes…, en anterior domingo nos ganaron a los 92’, y esta vez nos empataron a los 91’…; síntoma de total distracción y falta de concentración en nuestra defensa… y ya van 5 partidos seguidos que no ganamos…

Dos goles increíbles se perdió Reina…; sobre todo el que cuando se jugaban los 93’ y se quedó sólo frente al guardameta celeste…; era victoria nuestra…, ERA; fue recriminado dicen (y con total justicia) por varios de sus compañeros..

Pero es verdad que también nos salvamos nosotros…, los parantes le dijeron NO al ex Baisa Charles Da Silva cuando nuestro felino Vaca ya estaba vencido…

Buena actuación del moreno Cunningham; la mejor que le vimos en toda la temporada…
Duro el golpe recibido por Bejarano en un choque aéreo …, los periodistas que trasmitían el encuentro mencionaban una herida de 4 centímetros en la cabeza…; ojala se recupere este nuestro buen lateral “cabeza dura” …

Si todos los partidos se jugaran como ayer se jugó en los últimos 10 minutos…, ahí sí que nos pareceríamos algo al fútbol de las Europas…, muy emocionante…

El domingo jugamos frente al Blooming en Santa Cru; será a partir de las 18:00 horas y también lo podremos observar mediante la TV.

Pan quemado en la puerta del horno

En medio de las amarguras futbolísticas —por la eliminación de The Strongest de la Copa Libertadores de América y por su magra campaña en el certamen de la Liga, que lo ha rezagado—, Escobar vivió ayer momentos de felicidad.

Además del recién nacido, los otros dos hijos paceños del caudillo gualdinegro son Benjamín y Mateo; en cambio su primogénita Florencia nació en Argentina, cuando el volante jugaba en el Gimnasia y Esgrima de Jujuy. “Un hijo es una bendición de Dios. Por suerte salió todo bien. Está sano, es grande y ahora lo vamos a cuidar y querer bastante”, afirmó el mediocampista.

Las abuelas de Agustín estuvieron presentes: Graciela y María Angélica llegaron desde Paraguay y Argentina, respectivamente, para atender a su nuevo nieto. “Otro paceño más. Otro niño que nos hace querer más a este país donde tratan bien a mi hijo”, dijo Graciela Olivetti, la mamá de Pablo. Escobar matizó que con Agustín se completa la “familia Mercosur”, pues en ella hay miembros de Paraguay, Argentina y Bolivia.

El jugador de The Strongest anunció que el siguiente tanto que convierta en la Liga, que será el número 100 con la camiseta oro y negro, será dedicado a Agustín. “Ya que estamos cerca del número, con seguridad que el próximo gol que anote será para él, que coincidirá con el 100”.
Cuando se le consultó si le gustaría que alguno de sus hijos sea futbolista, el volante resaltó que “lo más importante es que se trate de hombres de bien y que trabajen mucho en la vida”. El “10” atigrado confesó que es un momento de alegría familiar en medio de la preocupación por el rendimiento del equipo. Escobar —que está lesionado— no jugará hoy en el estadio Félix Capriles de Cochabamba, frente a Aurora.

Los datos
Detalles. Agustín Escobar nació ayer a las 08.25. Con un peso de 3,930 kilogramos, mide 55 centímetros y goza de buena salud.

Nombre. Pablo Escobar contó que para los cuatro nombres que llevan sus hijos, en todos los casos se puso de acuerdo con su esposa Daniela.

Compañía. Las abuelas de Agustín, Graciela y María Angélica, comentaron que en estas semanas acompañarán el cuidado de su nieto y también de la mamá que dio a luz.

Se ha escuchado que parecían playmóbiles contra G.I.Joes. Una superioridad física incontestable, un atrevimiento táctico inalterable y una ambición deportiva digna de una película de redención. Borussia Dortmund y Bayern Munich han alcanzado la final de la Liga de Campeones en Wembley de esta temporada, de una manera más que merecida, aunque con sus bemoles cada uno de ellos.

Explotando al máximo sus posibilidades, manteniendo el orden a pesar de las circunstancias y ganando casi siempre los mano a mano en las puntas y dando batalla en el medio. Estas han sido las claves de su triunfo.

Para el Borussia, la semifinal en el Bernabéu se antojaba complicada por enfrentar a un rival de mucho nivel, aunque desgastado por pugnas internas y sin recambio en el lateral derecho. Es menester señalar que fuera de Alonso, los españoles madridistas no tienen comparación con aquellos de su máximo rival.

Los despistes de Ramos se suman al bajo nivel de Arbeloa, Albiol, Callejón y Morata, sin mencionar que casi por tres años, se espera a un Kaká que nunca aparece. La riqueza técnica de Lewandowski en la posición de centroatacante, el sacrificio de Gundogan y Bender en el doble pivote de contención por delante de la línea de 4 defensores, y la solidez de Hummels en la extrema defensa, fueron las claves de un partido que encontró al Madrid con 3 mano a manos en los primeros 10 minutos, sin la suerte necesaria para convertir por lo menos uno.

En una movida muy inteligente, Mourinho introdujo a Modric en el medio sector en detrimento de Khedira, para evitar que el enganche alemán, Reus, presione a Alonso en la salida española. Modric podía abrir las puntas o colocar pases directos a Ozil, pero la gran figura fue Weidenfeller, el portero del Borussia. La baja forma de Higuain y la imprecisión de Di María aportaron mucho a la imposibilidad madridista de remontar un 4 a 1 contundente del partido de ida. El merengue pagó caro su falta de intensidad y de ambición en ese partido.

Por su parte, el Barcelona había pensado que al igual que contra Milan o París Saint Germain, la tradición y los colores eran las únicas armas necesarias para vencer. Se encontró en el partido de vuelta con un Bayern que no cambió el esquema del partido de ida, simplemente sustituyó a Mario Gomez por el delantero titular, el croata Mandzukic y al defensor brasileño Dante por el belga Van Buyten. La plantilla del club de Bavaria es amplia. Tiene a los seleccionados alemanes Kroos (mediapunta) y Badstuber (lateral derecho) como suplentes, sin incluir a Gomez.

El equipo catalán jugó sin Messi, por problemas físicos, y empleó a Villa, Fábregas, Pedro, Iniesta y Xavi como hombres encargados de abrir el marcador. Impasible, el Bayern siempre abrió las puntas para que en el mano a mano, Ribery y Robben hagan la diferencia. Schweinsteiger hizo algo que muy pocos volantes intentan hacer: desafiar en la posesión del balón a Don Andrés, y para eso se apoyó en la solidez defensiva de su capitán, el lateral Lahm. La defensa del Barza no pudo ser arreglada por los esfuerzos de Piqué, y al final el tres a cero, con un 7 a 0 de marcador agregado, es un premio para un equipo que viene creyendo en la misma idea desde hace tres años y que tiene jugadores que intentan dar el plus necesario, cuando la situación así lo exige.

La final se jugará con dos equipos con propuestas tácticas similares, y seguramente ganará aquel que, entre otras cosas, pueda mantener el nivel futbolístico colectivo ante el cansancio o lesión. Se viene un gran partido entre dos maneras de entender el futbol muy parecidas (para comprobar que no existe una sola ni esa que existe es la única legítima), pero con diferencias económicas abismales. El Bayern es el del billete. El Borussia es el del ahorro.