U de VINTO (1) vs. The Strongest (2)
The Strongest, el puntero absoluto del campeonato, después de igualar su partido con el segundo y golear a domicilio al tercero, se alistaba para enfrentar al colero absoluto.

Sí señores, el Tigre se fue a la tradicional ciudad de Quillacollo a enfrentarse al Universitario de Vinto que vino jugando sus partidos en Cocha, pues el coqueto y modesto estadio de esta ciudad folclórica estaba siendo refaccionado hasta el día de ayer.

Se gastaron millones de dólares en dicha reparación, pero ni un solo centavo de esos se vio en el césped, que lucía como el de cualquier parque o jardín de los alrededores. Pero como dijo Billy Viscarra antes del encuentro, ahí iban a jugar los dos equipos y no hay pretexto que valga.

Y aunque los vinteños andan últimos en la tabla, para nada fueron un equipo fácil de derrotar en este torneo, menos en su reducto donde de los pocos equipos que lograron victorias fueron precisamente Bolívar y Always. Además, cuentan con jugadores interesantes como el colombiano goleador que nos marcó dos goles anoches, de apellido Llanos, un delantero gabonés, además de los veteranos Huayhuata y Veizaga que aún juegan muy bien.

Se tenía que ganar para merecer el título, no porque sean ellos, sino porque no podíamos perder el paso así como no hay que hacerlo con ninguno del resto de los rivales, así como se hizo con Bolívar cuando fueron locales, Always en el Alto y hasta Nacional en Potosí, por mencionar a los tres que nos siguen.

El Pampa puso una alineación que ilusionaba con chicos que han tenido un buen desenvolvimiento a lo largo del torneo y merecían más minutos. Así Lino por fin fue titular todo el partido, Sotomayor arrancó de inicio, aunque algo retrasado de la posición donde rinde mejor, Chura en la delantera, Richet en el lateral…, pero con una defensa con serios problemas, con Castillo volviendo de su enésima lesión y Valverde siendo Valverde.

Y así es como en un partido de buen trámite el Tigre comenzó ganando como debe ser, pero sobre el final del primer tiempo, un blooper con una inmensa mala fortuna les dio a los k’ochalas la oportunidad que veían perdida.

Nadie, pero nadie hubiera predicho lo que pasó en el segundo, donde los de la U entraron dispuestos a ganar, mientras que los atigrados entraron totalmente nerviosos, hasta tal punto que los vinteños dieron la vuelta al marcador y hasta tuvieron ocasiones de ampliarlo.

Una catástrofe en el lugar menos pensado no nos quita nuestra primera posición en la tabla gracias a la diferencia de gol, pero permite que nuestros perseguidores nos iguales de momento, pues esta noche Always juega en Santa Cruz y si logra lo que nosotros no pudimos, puede volver a tomar la punta.

Escuché a algún periodista de medio pelo echándole la culpa a la inexperiencia de los chicos como Chura o Sotomayor que tuvieron la oportunidad de jugar, cuando fueron precisamente ellos los que jugaron mejor.

Fue nuestra desastrosa defensa principalmente la culpable, y obviamente si la defensa es una coladera, poco puede hacerse en ataque. Específicamente en el segundo gol de la U, Valverde se chocó contra Richet, cuando este último intentaba despejar un balón que venía colgado, en una muestra total de descoordinación que dejó solo al delantero para fusilar al Billy.

En resumen y en general, el líder estuvo perdido y extraviado y no pudo contra el colero, poniendo al torneo más caliente que nunca. Ya no dependemos de nosotros mismos, pues de momento dependemos de que Bolívar no golee en sus siguientes partidos y de que Always no gane en Santa Cruz.

Lo dijimos, quedan 7 partidos ahora, y son igual o más importantes incluso que los jugados contra los paceños, pues ahora se trata de ser constantes y de demostrar el resto físico que nos queda.

No queda más que seguir apoyando, como se hizo en el Clásico y tener en cuenta que muchas veces el Tigre ha ganado ligas gracias a su hinchada, pues en estas circunstancias nos hemos encontrado siempre a lo largo de nuestra historia.

No abandonemos al equipo que viste nuestros colores.

¡¡¡Vamos Tigre!!!

.Introducción: el Tigre puntero visita la casa del colero Universitario de Vinto, que no gana hace seis fechas. Biaggio sorprende con un onceno “Frankenstein”. Mete cinco cambios (uno de ellos, obligado) y deja afuera a Wayar, Triverio, Ortega y Esparza. Entrega el cintillo de capitán a Saúl Torres. Arma un “doble cinco” inédito con Richet y “Saucedo. Y coloca a Chura de media punta con el inofensivo Prost. El “Pampa” menosprecia a su colega, Pablo Godoy (ex Always Ready), el gualdinegro subestima al “manzanero”. ¿De verdad no se aprendió nada? En el Estadio Municipal de Quillacollo, otra mala cancha, hay mayoría de hinchas stronguistas.

Nudo: el Tigre aprieta de inicio, es sabedor de todo lo que se juega. Es un espejismo que dura menos de lo que canta un gallo. El gabonés Roy Ndoutoumo comienza a merendarse a Torres, lo hará toda la tarde. Biaggio lo va a terminar sacando para meter al final del partido a… Quaglio. La "U" de Vinto crece porque cree. Fabrica hasta cuatro ocasiones claras de gol, tiene todo, menos precisión. The Strongest es un monumento a la imprecisión, es una colección hermosa de pases feos. Solo a la media hora reacciona, como en el clásico. Chura, el hombre que aparece y desaparece como por arte de magia, monta una jugada de otro partido y la termina con un golazo. El Tigre defiende muy mal, no tiene contención, no posee laterales, ni centrales. ¿De verdad sigue jugando Valverde? El empate sobre el descanso pone un poco de justicia en el ”score” en el enésimo error de Torres, en la penúltima distracción de Saucedo y Gómez.

Desenlace: la segunda parte es peor aún. Otro desastre defensivo pone un merecidísimo dos a uno para los cochabambinos que juegan más y mejor, que ponen más actitud sobre la cancha (se juegan el descenso y el pan sobre la mesa). Los tres cambios tardíos (Triverio, Esparza y Ortega) no cambian nada. La roja de Triverio es la desesperación absoluta. El tres a uno está más cerca que el empate. El ADN no aparece; los caudillos, tampoco. La banca no existe. La imagen de Biaggio es la metáfora del descalabro: se sienta en la banca, abre los brazos y las piernas, firma la derrota. Es la imagen del conformismo, de la impotencia, de la incapacidad. ¿Cómo vas a transmitir la esperanza de una remontada con semejante resignación? El “Pampa” se despinta, su efecto inicial es un vago recuerdo. El Tigre le queda grande. De verdad el presidente Montes armará el Tigre 2023 de su mano? ¿Se reeditará así la dañina sociedad Crespo-Díaz?

Post-scriptum: faltan 21 puntos. Son muchos. Me preocupa el efecto psicológico de este varapalo “insólito”. Todos hablan de maldición, otra vez. Dicen que el Tigre juega contra todo y contra todos. Es mentira. Ha dejado de creer y juega contra sí mismo.

Viscarra (9): Mala suerte del Billy que no le quita su sitial de mejor portero de Bolivia

Torres (6): Saúl hace lo que puede, tal vez le vendría mejor jugar como lateral más adelantado. Necesitamos laterales defensivos con urgencia

Valverde (4): ¿De verdad no tenemos centrales en la reserva?

Castillo (6): El mejor central que tenemos, con eso se dice mucho de nuestra pobre defensa

Lino (8): De toda la línea defensiva es lo mejor ¡Por fin jugó un partido entero!

Arrascaita (7): Jaime no baja su ritmo, pero pronto se suma al recital de errores en momentos en los que más se lo necesita

Gómez (6): Richet es muestra clara de cómo retrocedió el Tigre ante la ineficiencia de nuestra zaga

Saucedo (5): El Menona vuelve a la titularidad, pero no agarró el hilo

Sotomayor (9): ¡Es un crack! Qué jugada se mandó en el gol del Tigre. Tiene que jugar más.

Prost (4): Buen pase de Martín para el gol de Chura, pero nada más

Chura (8): Otro crack que está volviendo, tiene que jugar más. Muy buen gol.

Triverio (3): Tonta, tontísima su expulsión, gran perjuicio para el Tigre, pues es un jugador vital

Esparza (7): Poco pudo hacer nuestro excelente jugador.

Ortega (7): El colombiano jugó incómodo, aunque siempre nos deja chispas de su calidad

Quaglio (7): En los pocos partidos que jugó siempre lo hizo bien, creo que es hora de anteponer la calidad a la antigüedad

Wayar (8): Con una defensa en problemas como la nuestra, el Capitán debería jugar siempre.

Biaggio (3): Entró en la dinámica de todos los entrenadores de poner jugadores que no rinden solo por el hecho de que son mayores o llevan tiempo en el equipo. Se equivocó de cabo a rabo en este partido.